jueves, 26 de agosto de 2010

Me hiciste recordar...


Y estoy aqui, parado una vez más, descansando de la vida, sin localizar, consciente del paso del tiempo, aprendiéndolo a disfrutar, pensando...



La solitaria carretera parece dormida a esta hora incierta en que el amanecer aún me permite contemplar la tenue luna. La cascada de nubes deslizándose montaña abajo me enseña que tras alcanzar la cima no queda otra opción que caer...

Es un bello espectáculo.

Me hubiera gustado tenerte a mi lado para poder haberlo vivido juntos, para compartir al mismo tiempo ese instante de felicidad...